¿Hay límites para el uso de la IA Generativa en el arte y la educación?

Las últimas semanas las noticias sobre IA han encendido nuevamente las redes con debates importantes sobre su uso, por lo que es un buen momento para recurrir a una de las ramas más antiguas de la filosofía para analizar este dilema, la ética. La ética nos ayudará a navegar este tema complejo preguntándonos, qué es justo, qué no lo es, o qué está bien y qué está mal.

IAEDUCACIÓNARTE

Rob Vallejo

4/10/20258 min read

Si utilizaste ChatGPT para generar imágenes al estilo Ghibli, esto te interesará.

A partir de una actualización en la generación de imágenes de ChatGPT que se realizó a finales de marzo de 2025, la tendencia de recrear fotografías en imágenes al estilo anime del renombrado estudio Ghibli inundaron las redes sociales. Esto tiene varias implicaciones. Por una parte, el modelo de IA debió utilizar varias imágenes similares para poder generarlas, incluso, sin autorización de los autores.

Hay muchas preguntas. Primero, ¿cómo afecta a los artistas esta facilidad para generar diseños complejos? Segundo, ¿es justo que los servicios de IA generativa puedan alimentarse de los estilos artísticos libremente y ofrecer una representación inmediata “a demanda” sin reconocer a sus autores? Sin duda, el desarrollo tecnológico avanza mucho más rápido que las regulaciones, por lo que es necesario preguntarnos ¿cómo deberíamos actuar al respecto?

Antecedentes legales

Mientras las batallas legales por infringir los derechos de autor se dan en las cortes, algunas de las demandas han sido colocadas por escritores como: George R.R. Martin autor de novelas épicas y guionista de la serie Juego de Tronos, y portales de noticias como The New York Times; OpenAI afirma que su uso de datos es legítimo a partir de información que se encuentra públicamente disponible en el internet, y defienden que los usuarios libremente puedan generar productos capaces de reproducir cualquier estilo.

Adicionalmente, cientos de autores de industrias del cine, arte y la música, entre ellos Paul McCartney, Guillermo del Toro y otros, han firmado declaraciones públicas para visibilizar su posición en contra del uso de material protegido por derechos de autor para el entrenamiento de modelos de IA generativa.

Por su parte, Hayao Miyasaki, cofundador de Studio Ghibli, ya ha expresado anteriormente su posición sobre el uso de la IA en la animación. En sus palabras, “Siento que nos acercamos al final de los tiempos, los humanos estamos perdiendo la fe en nosotros mismos”.

Esto lleva a preguntarnos, ¿cuál es el valor que se le otorga a la creatividad humana en comparación con los productos generados por IA? Éticamente, ¿los artistas deberían mencionar que su trabajo implica el uso de la IA y transparentar cómo se la utiliza?

El uso y la comercialización

Me interesa discutir estos dos espectros: las posibilidades que tienen los usuarios (no artistas) para generar productos en base a estéticas originales, y la comercialización del arte creado con IA. Personas como tú y como yo, que no tienen una formación artística ahora podemos generar representaciones de estilos e imágenes, vídeos, animaciones, incluso literatura que ha sido desarrollada por verdaderos artistas. Ellos han invertido tiempo, creatividad y dinero en dar a luz creaciones originales. Por supuesto, para nosotros esta posibilidad es hermosa, podemos convertir rápidamente una foto, un garabato o una historia mal escrita en algo más bello. Sin embargo, algunas personas podrían crear obras a partir de IA y venderlas como algo original, lo cual es éticamente cuestionable.

Este es un caso: un libro en inglés llamado “Inteligencia artificial: Una guía para humanos pensantes” escrito por Melanie Mitchell en 2019. Poco después de este “boom” del uso de la IA con ChatGPT, ella se dio cuenta que una imitación de su libro creada con esta tecnología se estaba vendiendo en Amazon.

Mientras que el autor de un libro condensa años de su conocimiento, lectura, creatividad y podría dedicar varios años en desarrollar una obra original, los Modelos Grandes de Lenguaje podrían generarlo en pocos minutos en base a obras anteriores. Recientemente, se reportó que Meta ha entrenado sus modelos de IA con cerca de 7 millones de libros sin pedir permiso, pagar o reconocer a sus autores.

En un mercado como este, ¿cuántos nuevos autores originales decidirían emprender este negocio, si su trabajo puede ser copiado e integrado en una obra generada por IA en pocos minutos y comercializado por el mismo precio?

Este es llamado a cuestionarnos cómo utilizamos estas herramientas y también cómo consumimos los productos resultantes. En mi opinión, al igual que la venta de una copia de una pintura original no debería tener el mismo valor en el mercado, estas copias literarias deberían transparentar su desarrollo para que el consumidor decida si quiere pagar su precio.

¿Cómo afecta la tecnología al arte?

Es importante también mencionar que la tecnología está cambiando el arte, como lo ha hecho anteriormente. Si vemos hacia el pasado, Andy Warhol utilizó la serigrafía, una técnica que permitió transferir tinta para reproducir imágenes mediante una malla extendida en un marco. Más recientemente, a través del 'mapping', hemos visto representaciones animadas que son proyectadas sobre estructuras arquitectónicas.

Estas son algunas formas de expresión artística a través de la tecnología:

La tecnología sin duda da paso a nuevas formas de expresión y nos lleva a preguntarnos algo básico:

¿Qué es arte?

Para alcanzar alguna definición o caracterizarlo, podemos afirmar que el arte puede tratarse de artefactos o representaciones que intencionalmente han sido dotadas de características estéticas por sus creadores, esta estética puede superar la que poseen varios elementos cotidianos. La creación de representaciones artísticas es características de casi todas las culturas humanas conocidas.

Cuéntame tú, ¿cuál es tu experiencia con el arte? ¿crees que la definición y el valor de las experiencias estéticas pueden cambiar con la integración de la inteligencia artificial y la comercialización de sus productos? ¿Dónde deberíamos establecer los límites?

La IA en la educación

Así como el proceso artístico aún es una particularidad humana e involucra elementos complejos del autor como la interacción con el medio, sus experiencias y emociones; de manera similar, el proceso educativo involucra el contexto, la socialización y requiere de una guía para encaminar a los estudiantes adecuadamente hacia los objetivos de aprendizaje.

Desde una perspectiva positiva, hay beneficios en la aplicación de la IA generativa en la educación, entre ellos se puede mencionar la personalización de las clases, el mejoramiento de la atención de los estudiantes, y su apoyo para promover la creatividad y el pensamiento crítico. Sin embargo, no dejan de existir riesgos que van de la mano, como la desinformación, los sesgos, el plagio que, en general, responden a una dependencia excesiva a esta tecnología.

Estos elementos estéticos pueden ser comprensibles, al menos parcialmente, por otras personas que no pertenecen a la cultura propia del autor. Los elementos artísticos en algunos casos podrían haber tenido funciones no necesariamente estéticas, sino otras como ceremoniales, religiosas o propagandísticas.

Cupid and Psyche
Cupid and Psyche

Escultura de Cupido y Psique por Antonio Canova - Museo Louvre

Las obras de arte tienen un alto valor de diferente tipo. Tal valor tiene tanto el hacer, como el consumir arte. Este valor puede ser económico, o denotar un poder moral y político, así como estético.

El arte está cambiando constantemente, de la mano con el resto de la cultura. Los artistas adquieren nuevas experiencias creativas pueden desarrollarse nuevos géneros, formas de arte y estilos. El arte también evoluciona según los estándares de gusto y sensibilidad; incluso de acuerdo con la comprensión de las propiedades estéticas, la experiencia estética y la naturaleza del arte.

Finalmente, pueden existir muchas cosas además de las obras de arte que pueden tener propiedades estéticas que son interesantes, como los fenómenos naturales: atardeceres, paisajes, el arcoíris, también los seres humanos y las entidades abstractas: teorías, pruebas, ecuaciones.

a church with a golden alter and paintings on the walls
a church with a golden alter and paintings on the walls

Iglesia de la Compañía de Jesús - Quito

a chalkboard with some writing on it
a chalkboard with some writing on it

En enero de este año, la UNESCO publicó una nota por el Día Internacional de la Educación 2025, llamada “Inteligencia Artificial y educación: Preservar la autonomía humana en un mundo de automatización” en respuesta a esta preocupación por el aumento acelerado de la automatización, ya que, mientras aumenta la penetración de los sistemas digitales y de IA, los límites entre la intención humana y la acción impulsada por máquinas son borrosos. En otras palabras, ¿hasta qué punto el ser humano tiene control de los resultados de su uso?

Incluso desde la UNESCO, la IA tiene especial atención, por su potencial para transformar las sociedades, las economías y por supuesto los sistemas educativos. Además, su capacidad única para imitar el comportamiento humano impacta directamente en la capacidad de tomar decisiones, por lo que estos desafíos críticos requieren competencias específicas que van más allá de una alfabetización digital tradicional.

Y es que, ahora mismo, al menos en países con altos ingresos, dos de cada tres estudiantes de secundaria utilizan la IA Generativa para resolver sus tareas académicas. De manera similar, muchos docentes utilizan estas tecnologías para el desarrollo de sílabos y evaluar a sus estudiantes.

Para alinear nuestros objetivos con los resultados que podemos obtener de la IA es importante definir las responsabilidades tanto de los humanos como de los algoritmos, y para lo cual, se necesita investigación, gobernanza y acción.

woman and man sitting in front of monitor
woman and man sitting in front of monitor
a close up of a keyboard with a blue button
a close up of a keyboard with a blue button

Por todo lo anterior, el debate y la regulación deben ser prioritarias para adaptarnos al impacto de esta tecnología disruptiva en aspectos importantes para la sociedad humana, como son el arte y la educación. Es necesaria la implementación de políticas a nivel estatal y organizacional, de manera que se puedan establecer lineamientos tanto éticos como legales para el uso adecuado y seguro de la IA generativa.

En resumen, ¿existen límites que no deben cruzarse? Sí, y es importante mantenernos actualizados sobre los avances de esta tecnología, sobre su funcionamiento, sus beneficios y también sus riesgos para responder caso por caso esta pregunta. Pero en general la respuesta sería: al menos en la educación, la IA generativa no debería reemplazar los procesos esenciales que el aprendizaje busca: desarrollar el pensamiento crítico, la inteligencia emocional y la construcción de relaciones interpersonales.

people sitting down near table with assorted laptop computers
people sitting down near table with assorted laptop computers

¿Te gustó el tema? Extiéndelo con este vídeo

Suscríbete al newsletter

Recibe información sobre actualizaciones, noticias y capacitación.